se esconde mi pensar todo el día
en la última mirada de tus ojos
que opaco el semblante de mi alegría.
Como huracán tu existencia fue,
removiste mis entrañas
arrasando con todo mi interior.
Dejaste mi corazón a solas
a la deriva en esta existencia sin vida.
Fuera de mi soledad esta tu dicha
sobre escombros de desolación
ha caído mi alma, en ocasos de dolor.
Por las noches pienso
en la dicha de haberte conocido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Dejame tu comentario